martes, 13 de marzo de 2012

Por los que siguen

Un año ha pasado ya desde que, acabado de emprender el camino en este blog y habiendo encontrado blogs como el de Nora u Oskar, se me revolviera el alma al enterarme del terremoto y tsunami en aquella isla tan lejana en la que viven personas que apenas conozco y de las que en mi vida hubiera oído hablar de no ser por esto de internet. Y aún con lo lejana que está y lo poco que les conozco, se me puso un nudo en la garganta (y aún se me pone) al ver las imágenes de los destrozos que causó aquella ola. Y es que por mucho que Japón esté muy lejos, las imágenes que nos llegaban, eran desoladoras.

Ya sé que esta entrada es más propia del día 11 que de hoy, pero, aunque también es cierto que ha venido dada así, el principal motivo de la tardanza ha sido previamente meditado. Lo que pasó aquél día es algo que no se puede reducir a una fecha, porque aún hoy, un año después, quedan vestigios y los seguirá habiendo durante mucho tiempo.

Ya se sabe que en muchos sitios se han llevado a cabo eventos y demás, y Londres, con tanta mezcla de cultura, tiene bastantes Japoneses afincados aquí, así que no faltó el correspondiente acto para recaudar fondos, que estuvo organizado por Aid For Japan. En esta organización, recaudan fondos para los niños que quedaron huérfanos a causa del tsunami. Y es que se perdieron muchas vidas, muchos sueños, muchas ilusiones... Se perdieron muchos futuros, pero aún con todas esas pérdidas de las que lamentarnos, tenemos que alegrarnos por los que siguen.

Ayer, domingo 11 de Marzo, desde el escenario de aquella pequeña sala, nos dieron a todos los presentes la oportunidad de sumergirnos en la cultura japonesa durante unas horas, cosa que hicimos más que contentos, sabiendo que lo que allí se recaudara iría a parar a los fondos de la organización.













Hubo demostraciones...















Música...















Danza...















Stands...















Talleres...



Lo que aún no llego a entender, es qué hacía Picachu en el escenario...



Y, por supuesto, no podía faltar el recuerdo a todos aquellos que perdieron la vida durante aquél fatídico día. Pusieron un vídeo recopilatorio de imágenes del tsunami y del terremoto que hizo que reinara el silencio absoluto. Durante los minutos que duró el vídeo, solo se oía la música que acompañaba a este, nada más. Después de esto, se había programado un minuto de silencio... Pero durante ese minuto se oyó a un crío que jugaba con su muñeco... Parecía que nos dijera a gritos que la vida sigue. Los niños pequeños no entienden de estas cosas... Bendita ignorancia.



Dicho esto, no me quiero despedir sin antes hacer mención a un 11M diferente y más cercano. Un 11M que también me revolvió las tripas porque, por horas, no le pilló a mi familia mucho más cerca de lo que hubieramos imaginado. Un 11M que hizo temblar Madrid y el resto de España hace ya 8 años. Un 11M que, unido al de Japón, han dejado esta fecha marcada en la mente de millones de personas.

Un saludo.

3 comentarios:

Perséfone dijo...

Estoy bastante de acuerdo contigo: la solidaridad, el recuerdo y, sobre todo, la consternación que provocan ciertos hechos no deberían reducirse a una única fecha del calendario.

Gracias por las fotos.

Un abrazo.

nora dijo...

Seguiremos caminando ;)
Un fuerte abrazo y cuídate mucho.

Una ignorante dijo...

Perséfone: Siempre deberíamos tenerlos en mente. Las fotos no son gran cosa, pero me alegro de que te gusten ;) Un saludo


Nora: Cuídate tú también!